Para esta ocasión tan especial nuestra Hermana Mayor Isabel Barrios ha vestido a la Santísima Virgen de la Cabeza con el denominado «manto de la alegría” , ofrendado a nuestra Patrona en este mismo año por la familia Alcantara – Flores.
Se trata de un diseño de corte regionalista cargado de simbolismo renacentista, inspirado en elementos extraídos de la propia reja del presbiterio del Santuario y el propio camarín.
Dicha ornamentación parte de un eje o rama central, compuesto por una sucesión de jarras o macetillas de las cuales surge, a modo de roleos, las sucesivas hojas de acanto que se distribuyen tanto de forma abierta como de perfil por todo el manto. A su vez, de estas, surgen tanto cornucopias como diferentes flores.
La zona inferior del eje principal, incluye una cartela que guarda la heráldica de los donantes. surte una serie de gacetillas que en su parte central sujetan una jarra de gran volumen, símbolo de la abundancia y realeza de María, flanqueada por dos ángeles a modo de atlantes, muy característicos de la ornamentación de corte renacentista.
Todo este conjunto lo remata el anagrama de María, coronado con azucenas, símbolo máxime de María como Reina Asunta a los cielos y Coronada como Madre de toda la creación.
De este eje principal, surge toda la cenefa perimetral a modo de roleos de acanto, de los cuales se entrelazan cuatro dragones de acantos o grotescos, que dirigen las diferentes calles o nerjas ornamentales.
La saya de la Santísima Virgen responde al mismo programa armamentístico, en este caso no hay dragones a modo de grotescos, sino que son ángeles los que rematan la ornamentación de esta.
Finalmente, el mantolin del niño, rematan de manera perfecta la ornamentación diseñada para completar un terno que sin duda es una joya a medida para la Reina de Sierra Morena.
Una pieza pensada desde su origen para ensalzar y engrandecer la venerada Imagen de Ntra. Sra. de la Cabeza vistiéndola con oro de ofir.